Buscan a un hombre de 86 años desaparecido en Calp tras desorientarse al volante
Ángel García Castaño fue visto por última vez anoche cuando acudió a repostar y a estas horas tampoco se localiza el vehículo
La Policía Local de Calp ha informado de la desaparición de Ángel García Castaño, un hombre de 86 años, quien fue visto por última vez la noche del pasado martes. El desaparecido se encontraba conduciendo su vehículo, un Fiat Panda azul con matrícula 6417DLN, cuando en una llamada a su hija confesó estar desorientado y nervioso.
La Policía Local de Calp ha compartido en redes sociales la desaparición de Ángel García Castaño, un hombre de 86 años que fue visto por última vez en la noche de ayer.
Según ha podido saber Calp Digital, Ángel acudió cerca de las 21:00 horas a poner gasolina a la gasolinera DRZ en su vehículo, un Fiat Panda azul con matrícula 6417DLN.
Tras retomar la marcha, en una última llamada a su hija le confirmó estar desorientado, además de mostrarse nervioso. Ángel solía limitarse a desplazarse desde su vivienda, un chalet a las afueras, a la heladería que regenta su hijo Miguel Ángel en el paseo de La Fossa. Además, de acudir a la gasolinera para rellenar el depósito.
A estas horas no hay ninguna novedad de su paradero, ni del vehículo desde anoche. Además, tampoco tiene batería en el teléfono móvil. En estos momentos, la Guardia Civil está intentando geolocalizar la ubicación de la última llamada.
El comunicado policial explicaba que es un hombre de 1,78m de estatura y de complexión delgada, que suele vestir pantalón vaquero y camisa.
La Policía Local de Calp ha compartido en redes sociales la desaparición de Ángel García Castaño, un hombre de 86 años que fue visto por última vez en la noche de ayer.
Según ha podido saber Calp Digital, Ángel acudió cerca de las 21:00 horas a poner gasolina a la gasolinera DRZ en su vehículo, un Fiat Panda azul con matrícula 6417DLN.
Tras retomar la marcha, en una última llamada a su hija le confirmó estar desorientado, además de mostrarse nervioso. Ángel solía limitarse a desplazarse desde su vivienda, un chalet a las afueras, a la heladería que regenta su hijo Miguel Ángel en el paseo de La Fossa. Además, de acudir a la gasolinera para rellenar el depósito.
A estas horas no hay ninguna novedad de su paradero, ni del vehículo desde anoche. Además, tampoco tiene batería en el teléfono móvil. En estos momentos, la Guardia Civil está intentando geolocalizar la ubicación de la última llamada.
El comunicado policial explicaba que es un hombre de 1,78m de estatura y de complexión delgada, que suele vestir pantalón vaquero y camisa.
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