El tripartito rechaza la propuesta del PP de rebajar el IBI para compensar la subida de la tasa de basura

El Grupo Municipal del Partido Popular de Calpe ha mostrado su descontento tras el rechazo del tripartito formado por Somos Calpe, PSOE y Compromís a su propuesta de reducir el Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) para compensar el "brutal incremento" de la tasa de basura, que en algunas zonas de Calp supone la triplicación de los recibos.

Durante el pleno celebrado en noviembre, el gobierno local reconoció abiertamente que necesitan recaudar 2,5 millones de euros adicionales de los vecinos para mantener su política fiscal. Desde el Partido Popular, consideran que esta medida no es más que una subida encubierta de impuestos que recaerá sobre el bolsillo de los calpinos.

En palabras del grupo municipal, "Ana Sala nos engaña. No solo ha incumplido su promesa de no subir los impuestos, sino que utiliza la normativa de Europa como excusa para castigar a los vecinos con uno de los incrementos impositivos más brutales de la historia de Calp."

Según el PP, la alcaldesa ha justificado el incremento de la tasa de basura afirmando que responde a un "imperativo legal" europeo y que lo hace "con todo el dolor de mi corazón". Sin embargo, el Partido Popular señala que estas justificaciones son insuficientes y califican la medida de arbitraria: "La Unión Europea pide que el servicio de basura sea sostenible, pero no dice que se llegue ahí necesariamente exigiendo a los vecinos que paguen más por lo mismo."

El Partido Popular planteó una medida temporal para aliviar el impacto económico en los vecinos mientras se diseñan sistemas que promuevan las buenas prácticas en reciclaje y reutilización. Según explicaron, "nuestra propuesta era sencilla: reducir provisionalmente el IBI como medida de justicia social, mientras se estudia un sistema de bonificaciones que premie el reciclaje y la sostenibilidad."

El rechazo del tripartito demuestra, según el PP, que el gobierno local no tiene interés en reducir la carga fiscal de los vecinos. "Hay margen para aplicar una reducción impositiva. Calp es un ayuntamiento saneado, pero el tripartito prefiere exigir más dinero a los vecinos antes que controlar sus políticas de gasto," afirmaron.

Desde el Partido Popular recuerdan que los calpinos ya soportan una elevada presión fiscal, pagando cerca de 18 millones de euros en IBI, lo que coloca a Calp entre las localidades con mayor carga impositiva dentro de su rango poblacional. Con el voto en contra del tripartito, el PP considera que se evidencia un problema de inestabilidad presupuestaria en la gestión local, que ahora busca compensarse con más ingresos a costa de los contribuyentes.

“Si no hubiesen subido la basura, hubiesen subido el IBI. Las políticas de derroche e improvisación de Ana Sala y sus socios son caras, y el coste lo asumirán los vecinos,” concluyen desde el PP.