Un proyecto sitúa el Barranco del Pou Roig de Calp como ejemplo de la degradación de los cauces tras la DANA

Un proyecto impulsado por profesionales de la arquitectura y la topografía plantea una lectura crítica del territorio valenciano tras los episodios de lluvias torrenciales asociados a la DANA, con especial atención al papel de los barrancos y cauces naturales. La propuesta titulada “Líneas y puntos. Cartografías críticas del agua y el olvido” ha sido presentada al I Concurso de propuestas destinadas a la prevención, análisis y gestión posterior de catástrofes naturales convocado por la Universidad de Alicante, tomando como caso de estudio el Barranco del Pou Roig de Calp, al que señala como ejemplo representativo de la ocupación progresiva de cauces naturales y de la falta de mantenimiento y planificación institucional.

La iniciativa parte de la premisa de que los efectos de la DANA no pueden entenderse únicamente como un fenómeno puntual, sino como el resultado de una acumulación de decisiones urbanísticas y una gestión deficiente del sistema natural de barrancos, cauces y vaguadas. Según recoge la memoria del proyecto, estos espacios han quedado relegados a un segundo plano en el debate público, pese a su papel esencial en la gestión del agua y en el equilibrio ecológico del paisaje mediterráneo.

En este contexto, el proyecto identifica el Barranco del Pou Roig, que atraviesa el término municipal de Calp, como un caso paradigmático de esta problemática. El documento señala que la falta de cuidado, mantenimiento y protección efectiva del cauce ha favorecido su progresiva ocupación, llegando incluso a permitir la implantación de edificaciones de carácter municipal dentro de ámbitos vinculados al barranco. Esta situación, según se expone, habría contribuido a incrementar el riesgo ambiental y a evidenciar la desconexión entre las decisiones urbanísticas y la lógica natural del territorio.

La propuesta contempla la elaboración de cartografías comparativas, modelos topográficos en tres dimensiones, imágenes aéreas obtenidas mediante dron y escáner láser, así como un vídeo documental de corta duración que registre el estado actual de estos entornos. Todo ello se complementará con un panel interpretativo que explique la metodología empleada y la lectura crítica del paisaje resultante.

Más allá del análisis técnico, el proyecto plantea contrastar el discurso institucional con la realidad material del territorio, poniendo de relieve las tensiones existentes entre urbanismo, política y naturaleza tras episodios extremos como la DANA. Entre sus objetivos figura también fomentar el debate ciudadano y académico sobre la responsabilidad de las administraciones en la gestión del agua y del suelo.

La iniciativa ha sido presentada por el arquitecto Víctor Llanos de la Concha, con una trayectoria vinculada a la arquitectura sostenible, el urbanismo y la producción artística relacionada con el territorio, junto a un equipo especializado en topografía y digitalización 3D. El currículo aportado destaca trabajos previos en proyectos de documentación territorial y zonas inundables tanto en la Comunitat Valenciana como en otros puntos de Europa.

El concurso al que opta el proyecto, impulsado desde la Cátedra de Arquitectura Sostenible de la Universidad de Alicante en colaboración con la Generalitat Valenciana, tiene como finalidad financiar actividades y proyectos desarrollados en 2025 que aborden la prevención y la gestión posterior de catástrofes naturales desde enfoques transversales como la arquitectura, el urbanismo, la comunicación o las ciencias sociales.

En caso de ser seleccionada, la propuesta “Líneas y puntos” prevé difundir sus resultados en medios locales, colegios profesionales y ámbitos universitarios, así como adaptar el material generado para exposiciones y jornadas divulgativas, con el objetivo de trasladar el debate sobre los barrancos y la gestión del territorio más allá del ámbito académico.